Hoy rendí un final. Es la segunda vez que lo rindo, y en caso de desaprobarlo tengo que recursar la materia porque se vence la regularidad.
Mañana se vence la regularidad de otra materia, y pasado se vence la de otra.
Para la de mañana no sé prácticamente nada, ya la rendí una vez y también la desaprobé. Para la de pasado mañana directamente no sé nada.
Una parte de mi está enojada conmigo mismo por ser tan boluda. Por no haber rendido antes, por no haberme sentado a estudiar con más tiempo y/o más dedicación.
Pero mi otra parte, me mira desde lejos y me entiende.
Sabe que por alguna extraña razón empecé a tenerle miedo a los exámenes, ya sean finales o parciales.
Me gusta cursar, me gusta saber, me gusta opinar con fundamentos. Odio la gente que habla sin saber, que discute cagadas y que apenas la desafías a "googlear" la respuesta correcta hace un paso para atrás.
No me gusta no saber. Soy una máquina de "googlear", creo que Google es el mejor invento del siglo, le gana a los nuevos celulares, a Android, a los LCD, a todo.
Y, hablando de celulares, desde que tengo un equipo que me permite entrar a Internet en cualquier momento y/o lugar, siento que Google es mi mayor aliado.
No me discutas, porque lo googleo. Si no tengo razón, bajo la cabeza y aprendo; si tengo razón, me gusta que la gente también aprenda.
Tengo una compañera de la facultad que me discute todas las boludeces que se le ocurren. Pero es el tipo de persona que nunca reconoce que está equivocada. Muchas veces termino dándole la razón porque me doy cuenta que es una mujer que está muy cerrada y es al vicio gastar en mi energía en ella.
Pero bueno, me fui del tema.
Creo que es la primera vez que reconozco ante mi misma que tengo un problema con los exámenes.
Tal vez por eso no me siento a estudiar. Tal vez por eso no me concentro. Si no supiera que me están por evaluar, tal vez estudiaría más.
Lo que sí sé es que dejo TODO para último momento, y cuando me refiero a todo es a todo.
Si tengo una fiesta importante, dejo hasta el último día para medirme el vestido que supongo que me anda bien, que está limpio y que no hay que hacerle nada.
Si me dicen que vamos a salir a las 10.00, recién a las 9.30 entro a bañarme. Me baño a los pedos, me pongo lo primero que encuentro y le agradezco a Dios una vez más por haberme bendecido con un pelo extremadamente lacio que pase lo que pase siempre me queda igual.
Por qué soy así? Por qué dejo todo para el último instante?
Por qué trato de salvar relaciones recién cuando veo que están en la etapa terminal?
Por qué recién empiezo a hacer dieta cuando mi cuerpo está al limite con el sobrepeso?
Por qué no cuido mi tiempo?
Por qué no valoro todo lo que tengo?
De alguna manera tengo que empezar a ver el vaso medio lleno en vez de verlo siempre medio vacío.
Tonta no soy. Capacidad tengo. Qué me falta?
Me falta ser normal?????